La mañana del sábado 11 de marzo, en un emotivo homenaje que estremeció duros recuerdos de lucha de las mujeres en el Sitio de Memoria “Camarín de mujeres” del Estadio Nacional, se conmemoró el Día Internacional de la Mujer.
Próximos a cumplir 5 décadas del golpe cívico-militar que ocurrió en Chile, las mujeres ligadas a la Corporación Estadio Nacional Memoria Nacional en unión a la Fundación de Ayuda Social de Iglesias Cristianas -FASIC- y al Instituto de la Mujer, asumieron la tarea de rememorar a las compañeras sobrevivientes.
En la ocasión, gracias a la donación del Instituto de la Mujer, se llevó a cabo el relanzamiento del libro “Camarines de mujeres. Memorias de prisioneras políticas del Estadio Nacional”; además se inauguró la muestra visual “Delantales de la Dignidad” de Ruth Vuskovic Céspedes y se contó con la participación de las cantautoras chilenas Rossana Abeliuk, Cecilia Concha Laborde y Claudia Stern.
Representantes del Gobierno como Emilia Ríos, Alcaldesa de Ñuñoa y Haydee Oberreuter, ex Subsecretaria de Derechos Humanos y activista, nos acompañaron en este día y brindaron al público palabras de emoción, justicia y reparación.
Nuria Núñez, Presidenta de la Fundación del Instituto de la Mujer quien también fue reclusa en el Camarín de Mujeres, presentó nuevamente el libro que reúne las historias de siete mujeres, ex-prisioneras políticas que fueron detenidas en el centro de tortura situado en el Estadio Nacional de Chile, que demarca la vida de cada una ellas, antes, durante y después de sus detenciones, presenciando así la evolución de su condición de madre, pareja, sujeto político, prisionera, y sobreviviente.
Por su parte, Oriana Aravena Aguirre, decidió sumarse y acompañar a Nuria en el escenario en este importante momento, donde compartió palabras de fortaleza, recuperación y hermosa poesía.
En el contexto de memoria y sobrevivencia, Ruth Vuskovic Céspedes, vestida con el primer delantal que bordó estando presa, con conmoción expuso por primera vez su colección y finalizó el encuentro abriendo las puertas del Camarín de Mujeres, invitando a los asistentes a pasar al lugar.