Los inicios de la dictadura cívico-militar lo marca la violencia ejercida por los militares desde el 11 de septiembre, es en ese momento que comienza una espiral de violaciones a los Derechos Humanos. Frente a esta cruda y sangrienta realidad, es que un grupo de distintos personeros de la Iglesia Católica y Evangélicas, se reunieron a discutir de qué manera podían entregar protección hacia quienes estaban resultando perseguidos por el régimen. Una de las primeras acciones fue solicitar el régimen continuar respetando el estatus de refugiados de ciudadanos extranjeros, de esta manera se autorizó el 23 de septiembre de 1973 la creación del Comité Nacional de Ayuda a los Refugiados CONAR de carácter ecuménico y administrado por las iglesias protestantes. Es autorizado a funcionar a través de un decreto del gobierno. Este organismo tuvo ocho  casas de refugios para extranjeros a lo largo del país. Una de las figuras claves fue el Obispo luterano Helmut Frentz, junto a mujeres y hombres vinculados a distintas iglesias.

Comienza a llegar ayuda desde el extranjero, como del Consejo Mundial de Iglesias, de Pan para el Mundo, La cruz Roja Internacional y el Comité Intergubernamental para las Migraciones Europeas (CIME) que le otorgo protección internacional frente al Régimen. Es ese el inicio de la organización del ecumenismo durante la dictadura militar.

Una vez que termina la tarea de ayuda a los refugiados, se presenta un nuevo desafío ayudar a quienes se les conmuto la pena por extrañamiento a través de la promulgación del Decreto Superior 504 por la Junta de Gobierno, El D.S 504, fue producto de una negociación entre el gobierno y organismos e instituciones relacionadas con los Derechos Humanos este es el caso de CIME, ACNUR y CICR, que fueron las organizaciones que firmaron un acuerdo tripartito incluyendo al Gobierno[1].

Fue en este contexto que se plantea crear una “institución que asumiera las tareas en proyección. Nuevamente fue Helmut Frenz quien jugó un papel relevante al impulsar una serie de reuniones en su casa para discutir la idea. Jorge Hourton, Wolfgang Werner, Roberto Kozak, José Zalaquett, Fernando Guzmán, y Claudio González participaron de ellas…, la idea que estaba a la base de la creación de la FASIC era de constituir un organismo que tuviera un carácter ecuménico y que por lo tanto canalizara la solidaridad y sensibilidad existente en el mundo de las iglesias cristinas frente a la violación de los Derechos Humanos”[2].

Nace el 01 de abril de 1975 la Fundación de Ayuda Social de las Iglesias Cristianas FASIC, de carácter ecuménico y administrado por las iglesias cristianas. Muchas de las personas que trabajaban en CONAR se incorporan a FASIC.

Estos antecedentes nos ayudan a entender como las iglesias cristianas y católica, tuvieron la capacidad de organización para relacionarse con organismos internacionales en el ámbito ecuménico y los Derechos Humanos, y de esta manera pudieron a ayudar a miles de chilenos y chilenas durante la dictadura militar. Sin duda esta capacidad de convivencia y organización supero creencias y posibilito la ayuda al prójimo sin egoísmos.

El ecumenismo fue y ha sido parte del espíritu y misión que FASIC hace 40 años firmo con las personas.

[1] http://www.cedocmuseodelamemoria.cl/wp-content/uploads/2013/12/Decreto-504-Joaqu%C3%ADn-S%C3%A1ez-Salazar1.pdf

[2] Mario Garcés-Nancy Nicholls. Para una historia de los DD.HH en Chile, Historia Institucional de la Fundación de Ayuda Social de las Iglesias Cristianas 1975-1991, Ediciones LOM 2005. P. 33.