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En Francia: FALLECIÓ EL REV. CHARLES R. HARPER, PIONERO DE LA DEFENSA DE LOS DERECHOS HUMANOS

En el sur de Francia, donde vivió sus años de retiro, falleció el miércoles por la mañana el pastor Charles R. Harper, promotor y defensor de los derechos humanos en Chile, América Latina y todo el mundo.

Sus padres llegaron a Brasil como misioneros presbiterianos norteamericanos en 1926, país donde nació en 1933, y vivió los primeros 17 años de su vida, educándose en escuelas de habla portuguesa e inglesa. Completó su educación en los Estados Unidos (TheCollege of Wooster, Ohio; San FranciscanTheologicalSeminary), culminando con un  Master en Estudios Políticos en la Universidad de California.

En su periodo de estudiante se contagió del “virus del trabajo por la justicia”, como él mismo relató en una entrevista que concedió a Presbyterian News Service, publicada el 15 de Julio de 2011, lo que lo condujo a “vivir en distintas partes del mundo”, sirviendo a la comunidad ecuménica como pastor de la Iglesia Presbiteriana.

Durante los 60s, ya en Francia, se hizo parte de la lucha por la descolonización, trabajando con jóvenes e inmigrantes argelinos en Marsella, a travésdel Comité Inter-movimientos de Asistencia a Evacuados (CIMADE). Más tarde, como Director del Centro Internacional Reformado John Knox, en Ginebra, apoyó a líderes eclesiásticos perseguidos en Mozambique, Angola y Cabo Verde, muchos de ellos actores clave en la lucha por la independencia de sus países.

En 1973, tras el golpe militar en Chile, el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) le encomendó la puesta en marcha de su Oficina de Recursos para los Derechos Humanos en América Latina, actuando como su Director Ejecutivo hasta 1992, año que asumió como Director Interino de la Comisión de Asuntos Internacionales del CMI, tarea que dejó al retirarse en 1995.

Desde su oficina en Ginebra y a través de sus viajes,ChuckHarper, se transformó en contraparte cotidiana de apoyo para pastores y profesionales de los organismos ecuménicos y de derechos humanos en Chile, y luego en otros países de América Latina, en la tarea de la promoción y defensa de tales derechos, y la denuncia de sus violaciones ante los organismos internacionales. Su propio testimonio de ese periodo quedó plasmado en su libro El acompañamiento: Acción ecuménica por los derechos humanos en América Latina 1970-1990, publicado en inglés y portugués el año 2006 (WCC  Publications).

Por encargo de la Presidenta Michelle Bachelet, en su primer mandato, el 4 de Marzo de 2010 Charles Harperfue condecorado por el Embajador de Chile ante los organismos internacionales en Ginebra, Carlos Portales, con la Orden de Bernardo O”Higgins, con grado de Gran Oficial, en reconocimiento por su compromiso en favor de los Derechos Humanos en Chile. En la ocasión, luego de expresar su solidaridad con Chile por el terremoto y maremoto ocurrido días antes, el pastor Harper manifestó:

“El 11 del mes de septiembre de 1973 el otro terremoto, aquél terremoto político-militar, originado de la maldad humana - digamos con precisión, el profundo pecado – y no de la naturaleza -  trajo la desesperación, la muerte y el sufrimiento.  Fueron sacudidos en aquel día no sólo la población en las costas, los campos y las montañas chilenas,  pero fueron también despertadas las sensibilidades y las conciencias de pueblos y naciones del mundo entero.”

El pastor Harperpasó sus últimos días acompañado por su hijo Steven y su hija Caroline, tras una severa crisis de neumonía. Al compartir la noticia de su fallecimiento, su amigo y colega, el Rev. DwainEpps, a quién el propio Chuck se había anticipado a pedirle que diga algunas palabras en su servicio fúnebre

Escribió:

“¡Que tremenda vida fue la suya! Él fue un don para tanta gente, cerca y lejos. Podemos estar agradecidos, porque después de todo ello, él ha sido llamado a casa tan suavemente como pudo ser posible. ¡Que bendición fue este apóstol a quien, yo creo, Cristo estuvo hablando en su hora final!”

Desde los organismos ecuménicos en Chile, que tuvimos el privilegio de contar con su amistad y colaboración, nos sumamos al agradecimiento a Dios por la vida y testimonio de Charles Harper.

Juan Sepúlveda G.

Integrante del Directorio de FASIC

Director de Planificación Institucional, SEPADE

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