El día 6 de octubre el equipo de FASIC, junto a Felipe Rojas Cortés, Coordinador Nacional del Programa Refugio acompañados de estudiantes en práctica, realizaron en la ciudad de Arica, en el borde costero, un catastro de personas migrantes y entrega de ayuda humanitaria a personas migrantes en situación de calle, quienes se encuentran pernoctando en carpas en las orillas de playas en sector La Puntilla y Chinchorro.
FASIC Móvil Arica se trasladó al borde costero para entregar canasta de víveres, ropa de cama y abrigo para niños y niñas migrantes que se encuentran en extrema vulnerabilidad. Estas familias también recibieron orientación migratoria para integrarse de manera informada al país.
Gracias a las campañas regionales "Un kilo de Amor" y "Abrigándote" organizada por FASIC en Arica, beneficiamos a casi 50 personas con canastas de alimentos, ropa de cama y juguetes para los niños y niñas.
¡Agradecemos a todas las personas que de manera solidaria aportaron a nuestras campañas!
En tiempos de emergencia sanitaria, crisis económica y política, la Iglesia Metodista, al igual que en la década de los ochenta, vuelve a levantar iniciativas como las ollas comunes y los comedores comunitarios y, por supuesto, a estrechar lazos con FASIC. “Cuando comenzó la pandemia surgió la idea y la necesidad de emular y retomar las experiencias que vivimos en los años 80. El evangelio debe reflejarse en acciones en favor de los que más sufren”, destacó Jorge Merino, Obispo de la Iglesia Metodista de Chile.
En Iquique, la Iglesia Metodista, a través de su olla común y del trabajo en equipo con FASIC, ha podido entregar almuerzo semanalmente a cientos de familias migrantes y refugiadas que viven en la Plaza Brasil y que llegan en condiciones muy delicadas de salud, la mayoría de ellas han pasado por Colchane, atravesando a pie la frontera. “Es mucho más que entregar un plato de comida, también es ayudarles a recuperar su salud que se ha visto deteriorada por el hambre y por las condiciones en las que han llegado”, señaló Victoria Cardemil, encargada de FASIC en la zona, quien además añadió que es muy importante la entrega de almuerzo en la zona porque las personas en los campamentos no cuentan con servicios básicos como baño, agua potable o gas para cocinar.
Por su parte, Jorge Merino aseguró que las organizaciones que trabajan con iniciativas sociales deben unirse para tener un alcance e impacto mucho más efectivo en el tejido social, especialmente en este momento que estamos viviendo, “considerando que el Estado y este Gobierno han sido tan inoperantes en darle soluciones a los más pobres. El fin es unirse y entregar este mensaje de esperanza que Dios nos entrega, no sólo con la palabra, sino con afecto y ayuda ”, precisó el Obispo Metodista.
Actualmente, la Iglesia Metodista de Chile ha levantado 17 ollas comunes de Arica a Valdivia y espera seguir con esta iniciativa durante todo este año.
Agradecemos el apoyo de nuestros amigos de América Solidaria, que nos han permitido a través de su colaboración entregar cajas de alimentos a nuestros usuarios de Santiago.
El trabajo en equipo y la solidaridad son fundamentales en tiempos de emergencia.
Compartimos este video con fotografías de la entrega de ayuda humanitaria realizada por FASIC Iquique a familias refugiadas y migrantes de la zona.
El trabajo en conjunto con la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) nos ha permitido entregar una serie de ayudas a estas familias afectadas por la emergencia sanitaria.
Nuestras oficinas han realizado una serie de entregas de ayuda humanitaria a familias refugiadas y migrantes de cada zona. Estas entregan incluyen cajas de alimentos, kits de abrigo, kits de higiene y kits de niños. Agradecemos al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), organismo con el que trabajamos de manera coordinada para entregar este aporte a quienes buscan en Chile un lugar seguro para vivir y que hoy se ven muy golpeados por la crisis económica y sanitaria.
Nuestra oficina de Arica hizo entrega de cajas de alimentos, kits de limpieza y pañales para las familias refugiadas y migrantes de la zona más golpeadas por esta pandemia. Esta actividad se realizó gracias a la labor que realizamos día a día en conjunto con el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
Agradecemos también a la Cruz Roja Chilena y World Visión, con quienes trabajamos coordinadamente para entregar kits de niño, de abrigo y de higiene femenina.
¡El trabajo en equipo es fundamental para salir adelante en esta emergencia!